La que estaba planeada para ser 'la excursión de excursiones' terminó como un capítulo de los Expedientes Secretos 'X'. Todo empezó con 17 excursionistas 'muysacalepunta' -al inicio-, dispuestos a gastar la suela de las botas en una travesía de 42 Km que comenzaría en la estación la Cima (Carretera México-Cuernavaca) y terminaría en el pueblo de Las Cruces (Carretera México-Toluca), 10 a 12 horas después. Bajamos del autobús, como estaba planeado, en la estación la Cima, con un día espléndido. El primer tramo de recorrido lo hicimos a buen paso, bajo un sol agobiante, por la carretera pavimentada que llega al pueblo del Capulín. De ahí nos internamos en el bosque, siguiendo a veces caminos de terracería, a veces veredas, o incluso a campo traviesa y parando sólo en contadas ocasiones. Después de 5 horas y media, llegamos al cruce de la carretera Ajusco-Jalatlaco y en un pequeño valle, nos sentamos a comer. Ahí fue donde, después de discutir media hora, hacer diecisiete conteos con resultados diferentes y dos plebiscitos absolutamente democráticos, decidimos que faltaba Pedro.
Realmente el extravío no pasó a mayores, pues apareció 15 minutos después; lo realmente perturbador del asunto es la FORMA en que se perdió.
La versión de Pedro fue por demás extraña: "En uno de los descansos, nomás me senté a beber agua y cuando me di vuelta, YA NO ESTABAN... ¿Porqué nadie ME AVISÓ que se iban?"-dijo.
A fin de cuentas, ya sea por abducción, siesta o distracción, entre los 15 minutos de pérdida de Pedro y la hora y media de búsqueda, se hizo tarde. Luego de una votación difícil, en donde casi todos pasamos saliva, pues nos iban a hacer machos a fuerza (Marco proponía terminar la excursión "aunque fuera a las 12 de la noche" y nadie quería ser el primero en rajarse); finalmente se impuso la cobardía y el buen juicio; por unanimidad declinamos la generosa oferta de caminar seis horas más. En vez de eso, nos fuimos a tomar unas unas chelas, echando porras a Pedro, nuestro salvador. Ahí terminó 'la excursión de excursiones'.
La versión de Pedro fue por demás extraña: "En uno de los descansos, nomás me senté a beber agua y cuando me di vuelta, YA NO ESTABAN... ¿Porqué nadie ME AVISÓ que se iban?"-dijo.
Esta explicación, tan misteriosa, nos inclina a pensar que la hipótesis de Ylma es correcta: "Se quedó dormido". Sin embargo, a pesar del cruento interrogatorio con tehuacanazos, lo más que pudimos hacer que aceptara el extraviado fue: "bueeeno... nomás me RECOSTÉ un poquito... ¡pero no cerré los ojos!"
La hipótesis alterna es que se trató de un auténtico caso de abducción extraterrestre.
A fin de cuentas, ya sea por abducción, siesta o distracción, entre los 15 minutos de pérdida de Pedro y la hora y media de búsqueda, se hizo tarde. Luego de una votación difícil, en donde casi todos pasamos saliva, pues nos iban a hacer machos a fuerza (Marco proponía terminar la excursión "aunque fuera a las 12 de la noche" y nadie quería ser el primero en rajarse); finalmente se impuso la cobardía y el buen juicio; por unanimidad declinamos la generosa oferta de caminar seis horas más. En vez de eso, nos fuimos a tomar unas unas chelas, echando porras a Pedro, nuestro salvador. Ahí terminó 'la excursión de excursiones'.
No hay comentarios:
Publicar un comentario