Por la carretera
Federal a Toluca, llegamos a ‘La Pila’. De ahí continuamos por un camino ancho
de terracería, subiendo por la cresta occidental del Sistema
Ajusco-Chichinautzin. En algún momento,
llegamos a la Cañada del Tantoco, donde encontramos
unas torres de alta tensión. Continuamos subiendo y ya para entonces, el cielo,
que inicialmente estaba muy nublado, se despejó y apareció un sol maravilloso
que nos acompañó prácticamente durante toda la excursión. En algún momento, casi de forma súbita, quedó frente a nosotros el
macizo rocoso con el Balcón de Golondrinas, pero la mentada ‘Cabeza de Washington’, que supuestamente
forma parte de esas peñas, nadie, ni siquiera Nicanor, la pudo identificar. En el último tramo, ya que habíamos
vsito el Balcón, nos desviamos y nos
perdimos (¡qué raro!). Estuvimos al menos una
hora intentando encontrarlo, hasta que, por pura serendipia, llegamos… como
quien dice, de puro churro. La vista desde
ese lugar es maravillosa, con la Cañada del Negro a nuestros pies, el cerro San
Miguel a la derecha y y la Marquesa y Peñas Barrón a la izquierda. El
regreso fue mucho más rápido, y para nuestra buena suerte, comenzó a
llover cuando estábamos a 20 metros del autobús.
viernes, 3 de agosto de 2012
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